Brisingr y Zar'roc tal y como aparecen en Eragon: Guía de Alagaësia
Brisingr es la espada de jinete de Eragon, después de que Murtagh le arrebatara a Zar'roc.
Descripción[]
En el libro se describe a Brisingr como una majestuosa espada tan magnífica como Zar'roc, Naegling y Támerlein, pero más bonita que todas ellas. De un color azul iridiscente, con intrincados diseños grabados en la hoja, entre los que destacan unas llamas que recorren la espada separando el filo de el resto de la hoja. La hoja estaba cubierta por una funda color azul (el azul que Saphira tenía en las escamas de su grupa), una pieza de acero brillante en forma de hoja decoraba la punta de la funda. La empuñadura era de mango y medio y estaba hecha de madera dura y oscura, el pomo se encontraba formado por un gran zafiro sostenido por cuatro nervios de acero pulido.
Algo peculiar de esta espada es que cada vez que Eragon pronunciaba su nombre se encendía en unas traslúcidas llamas de color azul. Rhunön pensó que esto era debido a que Brisingr era el nombre real de la espada.
Historia[]
El Acero Brillante[]
Durante la batalla de los Llanos Ardientes Murtagh le quitó Zar'coc a Eragon y desde ese episodio de vio en la necesidad de un arma. Tiempo después reemplazó su espada con un Bracamarte, pero este se rompió en el atentado que sufrió Eragon en los túneles de Farthen Dûr.
En busca de una espada de jinete de dragón, Eragon va a Ellesméra en busca de Rhunön-elda, para que le forje una espada nueva. Pero Rhunön le dijo que no podía, porque hizo un juramento en el Idioma Antiguo, bajo el cual no podría volver a fabricar armas de destrucción. Además de eso, si encontrara una forma de hacer la espada no podría porque no tiene el acero brillante con el que se fabrican las espadas.
Eragon se va de la casa de Rhunön decepcionado, y, mientras regresa, recuerda las palabras de Solembum. El chico entiende que el hombre gato tal vez no se refería a un arma tal cual, tal vez sabía de la existencia de un yacimiento de acero brillante debajo de las raíces del Árbol Menoa.
Runa que en el Idioma Antiguo representa la palabra 'Fuego'
Él y Saphira entraron en la conciencia del árbol, y le empezaron a hablar y a darle parte de su energía como un regalo de paz, pero el árbol no reaccionó, lo cuál molestó a Saphira, culminando en el momento en que Saphira prende fuego al árbol Menoa, haciendo que éste despierte de su letargo de miles de años, atrapándolos con su vasta mente y, cuando esta a punto de matarlos, Eragon logra decirle quiénes eran, porqué lo despertaron y lo que ocurre en el mundo, así como las palabras de Solembum y su deducción sobre el acero brillante. El árbol le da el metal a cambio de algo, que aún se desconoce.
La Forja[]
Después de que Eragon tomara el metal y se lo llevara a casa de Rhunön, ella le dijo que forjaría su espada. La elfa, después de un largo proceso de preparación para el horno y para el metal, tomó el control de los brazos y del cuerpo en general de Eragon, de esta manera podría fabricar la espada sin quebrantar su juramento, porque teóricamente ella no era la que estaba trabajando el metal.
El proceso de forja fue muy laborioso, hubo que calentar el metal, amoldar, golpear, cortar, lijar y pulir para conseguir solo la parte básica de la espada. Aunque no eran las manos de Rhunön y aunque se usó mucha magia en el proceso, el resultado fue una grandiosa espada de color azul zafiro.
Armas
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